Las alfombras a medida están en este mundo para ayudarnos a resolver un clásico problema: no encontramos la alfombra que necesitamos.
Hay muchas ocasiones en las que la alfombra que buscamos no aparece por ningún lado.
Y nos damos por vencidos sin darnos cuenta que la solución obvia es encargar una alfombra a medida.
En ocasiones no solo es la medida, sino que la textura o el color es lo que nos cuesta encontrar. Por eso las alfombras a medida te pueden ayudar más de lo que crees.
¿En qué materiales se puede hacer una alfombra a medida?
Tabla de contenidos
Prácticamente en cualquiera que se te ocurra. El abanico es muy amplio, aunque las alfombras de fibras sintéticas son mayoría, por su maleabilidad, versatilidad y resistencia.
Como por ejemplo las alfombras vinílicas a medida, que dan gran rendimiento en interior y exterior.
Las alfombras de polipropileno son también un clásico dentro de las alfombras a medida.
Con pelo o de nudo, lisas o texturadas, la gama es amplísima y ofrecen soluciones para todo tipo de ambientes, con la ventaja añadida de su alto rendimiento y gran facilidad de limpieza.
Otros materiales como poliamidas, acrílicos, poliéster, etc, nos ofrecen un sinfín de opciones de alfombras a medida cálidas y acogedoras, con pelo o de nudo, con infinitos tonos y una enorme riqueza y variedad de texturas.
Pero también con fibras naturales como la lana podemos encontrar alfombras a medida que, aunque requieran algo más de cuidados que las sintéticas aportan más calidez a la decoración.
¿En qué lugares es adecuada una alfombra a medida?
¡En donde la necesites! Pero hay algunos lugares en los que las medidas estándar de la mayoría de las alfombras no suelen encajar bien.
- Los pasillos, que son de longitudes y anchos variables, y que siempre quedarán mucho mejor con una única alfombra a la medida que con varias alfombras yuxtapuestas.
- Los espacios grandes, ya que hay muchos modelos de alfombras que no van más allá de los tamaños medianos.
- Los rincones o lugares con formas especiales o difíciles. Como por ejemplo las terrazas, lugares en forma de L, espacios alargados, zonas con columnas, etc.
- Los lugares que necesiten alfombras cuadradas (mismo largo que ancho) o redondas, que son las formas menos atendidas por las alfombras estándar.
Eso si hablamos de alfombras para la casa, en lugares públicos como despachos, oficinas, comercios, centros de estética, spas y otros presentan espacios tan variables que muchas veces necesitaremos acudir a una alfombra hecha a medida.
No te olvides de elegir el remate.
Otra ventaja de las alfombras a medida es que no solo podemos configurar material, textura y color, sino también complementar la elección con una gran variedad de remates disponibles, en función del tipo de alfombra.
Desde el clásico remate con festón de hilo hasta varios tipos de cintas, o incluso alfombras que por su naturaleza pueden ir rematadas al corte, ya sea con pelo que oculta el corte, o con corte a la vista como las vinílicas.