El mimbre es una fibra vegetal que pertenece a la familia de las salicáceas. La artesanía en mimbre está muy extendida en América y en Europa, sobre todo en los países mediterráneos como España, Italia y Portugal que tienen una gran tradición en la producción de esta materia prima.



Hace ya varias décadas la aparición de los materiales sintéticos y procesos de fabricación industriales desplazaron casi por completo a la artesanía del mimbre. ¿Quién nos iba a decir que volvería a ser de nuevo una tendencia en decoración?

¿Por qué los muebles de mimbre son la última tendencia en decoración?

La filosofía de «volver a lo natural» se ha traducido en un renovado interés por el mimbre.

El mimbre destaca por ser un material sostenible que utiliza muy pocos recursos energéticos en su producción. No es contaminante y una vez terminada su vida útil, vuelve a la Naturaleza.

Los muebles de mimbre son muy ligeros y con el tratamiento adecuado sirven tanto para interior como para exteriores, soportando las inclemencias del tiempo.

Encajan muy bien con un estilo de decoración mediterráneo y relajado. Particularmente, me gustan estos muebles con un simple barniz transparente que deje visible su color original, pero también pueden ir pintados de colores: blanco, negro, rojo, verde…. el que mejor encaje con el ambiente de la estancia donde los vamos a colocar.

¿Es lo mismo el mimbre que el rattan?

El término «mimbre» se utiliza para hablar de una gran cantidad de fibras naturales. Por lo general, el mimbre se corresponde con las fibras más finas y flexibles (se utiliza sobre todo en cestería) mientras que las más gruesas y resistentes se denominan rattan.

La mayoría de los muebles de mimbre, en realidad, están hechos de rattan o con mezcla de mimbre y rattan. Nosotros estamos utilizando en este artículo el término mimbre para referirnos más bien a la técnica artesanal y porque pensamos que es más popular y los lectores lo identificarán fácilmente.

El cuidado de los muebles de mimbre.

Los muebles de mimbre o rattan necesitan un mantenimiento para prolongar su vida útil. Al estar fabricados en fibras naturales pueden pudrirse o romperse si no seguimos una serie de precauciones.

  • Evita colocarlos en lugares muy ventilados o que reciban los rayos solares de forma directa.
  • ¡Cuidado con la humedad! podría echar a perder los muebles de mimbre en un corto plazo de tiempo. Si se llegan a mojar con la lluvia no cometas el error de apilarlos todos juntos a la sombra, pues de este forma el moho se expandirá con rapidez. Lo ideal es secarlos con un paño de algodón y dejar que se sequen luego al sol durante un rato.
  • Para quitarles el polvo ¡nada mejor que la aspiradora! Las motas más rebeldes que se depositan en las ranuras se pueden eliminar con una brocha.

¿Qué opinas sobre esta tendencia en decoración? ¿Te gusta cómo quedan los muebles de mimbre en tu hogar?