En la Era digital en la que vivimos, la tecnología ha avanzado a pasos agigantados, trayendo consigo muchas oportunidades. Sin embargo, los avances tecnológicos también tienen sus peligros y uno de ellos es el aumento de robos en los hogares.

Los delincuentes utilizan cada día métodos más sofisticados. El fácil acceso a la información personal y la proliferación de dispositivos inteligentes con conexión a Internet, ponen a disposición de los ladrones una gran cantidad de datos que pueden utilizar para planificar sus robos.

La Norma UNE-EN 50131-1 establece cuatro niveles de seguridad en función del riesgo al que se encuentra expuesta la propiedad, siendo el Grado 1 un protocolo diseñado principalmente para viviendas particulares y lugares con objetos de poco valor y el Grado 4 (el más alto) para bancos, museos, instalaciones militares e infraestructuras con un riesgo alto de intrusión y que requieren supervisión constante.

¿Cómo proteger el hogar con las últimas tecnologías frente al robo?

Afortunadamente, las medidas de protección son también cada día más eficaces. Los sistemas de seguridad actuales van más allá de las tradicionales alarmas para el hogar. Hablamos de sistemas de videovigilancia con cámaras de seguridad de alta definición y sensores de movimiento avanzados que permiten monitorear todo lo que ocurre en casa cuando no estamos con sólo echar un vistazo a la pantalla de nuestro smartphone. Algunos sistemas incluso utilizan algoritmos de inteligencia artificial para detectar patrones de comportamiento sospechosos y enviar alertas instantáneas.

Para tener un mayor control de acceso a la vivienda, podemos instalar un lector de llaves electrónicas o cerraduras inteligentes que permiten bloquear y desbloquear las puertas utilizando una aplicación móvil o incluso comandos de voz.

Otra forma clásica, pero eficaz de prevenir robos en las viviendas particulares es emplear dispositivos disuasorios como cámaras de seguridad a la vista de los intrusos o alarmas con sirenas que emiten un sonido fuerte alertando a los vecinos.

Algunos hogares utilizan también la domótica, es decir, aparatos conectados que se pueden controlar a través de una plataforma: luces, electrodomésticos, etc. De esta forma es posible simular nuestra presencia en el hogar cuando estamos ausentes.

Sistemas antihinbición para protegerse frente a los nuevos robos.

Para robar con mayor impunidad algunos ladrones utilizan inhibidores de señal. Estos dispositivos ilegales emiten señales de radiofrecuencia o electromagnéticas que anulan las frecuencias utilizadas por los sistemas de seguridad, como los CCTV o las comunicaciones inalámbricas.

Los sistemas antihinbición se han desarrollado para contrarrestar estos ataques y mantener la integridad y efectividad de los sistemas de seguridad. Monitorean constantemente el entorno buscando señales de interferencia. Si las detectan, activan métodos de seguridad adicionales o envían una alerta para tomar medidas preventivas.

Estos sistemas suelen cambiar de frecuencia de manera dinámica para ralentizar el trabajo de los inhibidores de señal. También pueden utilizar tecnología de encriptación que dificulta que los inhibidores puedan decodificar o interferir con la información transmitida.

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